La subida en el precio de la luz no es una buena noticia, y menos con la llegada del invierno. El frío enciende nuestros radiadores, la noche enciende nuestras lámparas y, en general, se gasta más energía. Y si se te escapa el calor de casa, ese gasto aumenta de forma inútil.
Por eso, con la llegada del frío hay que seguir algunos consejos para mantener el calor de una casa y que el gasto de energía sea el justo y necesario. Eso, ¡y que hay que estar agusto en casa! Así que hoy te damos cinco consejos para mantener el calor de casa en invierno.
Consejos para mantener el calor de casa en invierno.
Ten las ventanas selladas y las puertas cerradas
¿Sabías que casi un 40% del calor se escapa por pequeñas rendijas en ventanas y en los cerramientos de las puertas, así como huecos cerca de estos elementos? Las puertas y las ventanas son nuestro contacto directo desde casa al mundo exterior. Por ello, son el elemento clave para sellar correctamente una casa.
Para mantener el calor de tu casa en invierno, conviene reparar los imperfectos surgidos alrededor de puertas y ventanas con el paso del tiempo, así como sellar las ventanas para aislar tu hogar sin recurrir a grandes reformas. Lo más importante es ajustar los cerramientos de ventanas y balconeras, revisando las grietas que pueda haber en el techo y las paredes.
En cuanto a las puertas, se recomienda dejarlas abiertas en el momento más álgido que alcancen los focos de calefacción para repartir el calor de forma homogénea. A continuación, cierra las puertas para que el calor no se disipe y se concentre, sobre todo, en las habitaciones principales que más utilices.
Apuesta por un buen aislamiento térmico
El aislamiento térmico de una casa es fundamental para que se encuentre siempre a la temperatura más adecuada. Debes detectar los puntos donde exista una pérdida del aislamiento térmico; hecho eso, tendrás que obstaculizar el paso del aire al interior de la vivienda.
Si estos puntos son de un tamaño considerable es muy fácil verlo; sin embargo, las grietas no son tan visibles, así que no dudes en utilizar una vela encendida para buscarlas. Si una grieta no es visible, observa la llama de la vela; si se mueve, es posible que exista un agujero por el que pasa la corriente.
Revisa las cajas de las persianas
Es importante que compruebes el sellado de las cajas en las persianas.
¿Por qué? Para evitar que el calor se escape por posibles hendiduras en el marco de la ventana y sobre esta pieza en una fachada.
Las persianas actúan como aislantes para retener tanto el calor interior como el que nos proporciona el sol. Por eso, para que su misión no sea en vano, debes revisarlas antes de que comience el invierno para evitar pequeñas fugas por las que se disipe el calor.
Coloca alfombras y cortinas oscuras
¿Quieres mantener tus pies calentitos en invierno? Pues ponte unos buenos calcetines y compra una alfombra oscura y gordita. Y es que, de hecho, la finalidad principal de una alfombra, antes de ser un elemento decorativo, es la de aislar el suelo de corrientes y filtraciones de temperatura.
Algo similar ocurre con las cortinas. Por ejemplo, en el dormitorio puedes instalar cortinas oscuras y aislantes, fabricadas con una tela de un mayor grosor que las normales, que claramente protegen del frío si se confeccionan bien, pues sus pliegues retienen la luz solar. Y al ser de tela gruesa, cuando las corres al dormir no te molesta la luz del día siguiente. ¡Todo ventajas!
Usa termostatos para regular el sistema de calefacción
Para mantener el calor de casa en invierno es fundamental controlar la temperatura. Hay que mantener un ambiente agradable tanto en verano como en invierno; no sólo para estar agusto en casa, sino también para reducir el gasto de energía. Y es que el invierno suele suponer una subida tremenda de la factura de la luz y el gas.
Esto se consigue fácilmente instalando un termostato. Este aparato es capaz de regular la temperatura entre los 20º y los 22º durante el día, y entre los 15º y los 17º durante la noche. Así, con un buen termostato disfrutarás de un mayor confort en casa mientras ahorras hasta un 31% en gastos de calefacción.
Si sigues estos consejos, notarás que tu casa está mucho más caliente y el gasto de energía desciende significativamente. Esto supone más dinero en tu bolsillo y más salud en el planeta. ¡Haz la prueba!
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